🗣️ Si lo prefieres, puedes escucharlo.

¿Alguna vez has pensado en ver una serie empezando por el último capítulo?

No, ¿verdad?

Pues eso hacen los vende-PIAS.

Te hablan de lo genial que es el producto cuando rescatas, pero no te cuentan ni los impuestos que pagas antes de invertir ni cómo afectan a tu rentabilidad después.

Y tampoco te explican bien los planes de pensiones. Te hablan de los impuestos cuando rescatas, pero no de los beneficios fiscales cuando aportas.

Pero para entender un producto, te tienen que contar toda su historia.

Desde el principio hasta el final.

Eso es lo que vamos a hacer hoy.

Analizar la fiscalidad de los PIAS y los planes de pensiones desde que inviertes el primer euro hasta que lo rescatas.

Imagina que María y Juan ganan 35.000€.

Cada uno invierte 100€ brutos.

Juan en un PIAS y María en un plan de pensiones.

Juan, aporta 70€ tras pagar a Hacienda el 30% que le corresponde por su tipo marginal*.

María, invierte los 100€ completos gracias a la reducción del IRPF.

25 años después, ambos han triplicado su inversión.

El plan de pensiones vale 300€ y el PIAS 210€.

Primer punto a favor del plan de pensiones: al ahorrarnos los impuestos antes de invertir, conseguimos una mayor rentabilidad absoluta.

Este es el momento en el que el vende-PIAS te meterá miedo con el rescate del plan de pensiones.

Como tributas por la base general, Hacienda te meterá un hachazo y pagarás más impuestos que con el PIAS.

O eso te contará él.

¿Es esto cierto? Veámoslo.

Como tenemos buena cultura financiera, rescatamos el plan de pensiones de «a pocos» (renta periódica), no de golpe (capital).

Esto nos permite no solo controlar los impuestos que pagamos sino también que el resto del dinero siga creciendo en el plan.

Ahora, supongamos que el tipo marginal en el rescate del plan es el mismo que en la aportación del PIAS: un 30%.

Pagaremos 90€ de impuestos y nos quedarán 210€ limpios.

El valor del plan de pensiones después de impuestos…¡es igual que el PIAS antes de impuestos!

El plan de pensiones ya se ha llevado un empate.

Veamos cuántos impuestos paga el PIAS.

Primero, para beneficiarnos de sus ventajas fiscales, debes convertir el PIAS en una renta vitalicia. 

Y el valor de esa renta vitalicia dependerá de los tipos de interés en el momento de contratarla.

Si son altos, como a día de hoy, podemos tener una buena renta vitalicia.

Si son bajos, como hace un par de años, nos darán migajas.

Para maximizar el beneficio fiscal, supongamos que contratamos la renta vitalicia con 70 años o más.

Así, solo pagarás impuestos por el 8% de la renta.

Y este 8% tributará como rendimientos del capital mobiliario cuyo tramo más bajo es del 19%.

Es decir, si se mantuviesen los impuestos como hoy, pagarías el 19% del 8%.

De cualquier modo, aunque sean pocos impuestos, el PIAS pierde ante el plan de pensiones.

¿Qué conclusiones sacamos?

En el PIAS…

  1. Pagas impuestos antes de invertir, lo que perjudica la rentabilidad.
  2. Estás obligado a contratar una renta vitalicia cuyo valor dependerá de los tipos de interés futuros.
  3. El valor de la renta vitalicia es perpetuo y pierde valor año tras año por el efecto de la inflación.

En el plan de pensiones…

  1. Inviertes sin pagar impuestos al inicio, lo que beneficia la rentabilidad.
  2. Tienes control sobre cuánto rescatar cada año.
  3. La parte que no rescatas sigue creciendo y aumentando de valor frente a la inflación.

En resumen, el PIAS ni tiene ventajas fiscales exclusivas ni son mejores que en los planes de pensiones.

Y tú dirás.

«Si no se venden por su fiscalidad, será porque son mucho más rentables»

Eso lo veremos en el próximo «Cultura financiera en 2 minutos».

(*) Recuerda, el tipo marginal es el tipo impositivo que pagas en el último tramo del IRPF