CF2M #46 – Esa primera vez 💌

🗣️ Si lo prefieres, puedes escucharlo

Lo recuerdo como si fuera ayer.

Tras muchas semanas de duro trabajo, recibí su carta.

No me lo podía creer.

El corazón me salía del pecho.

En el interior del sobre, un folio color salmón.

No entendía muy bien lo que me quería decir.

Pero sabía que, al final de esa carta, estaba la respuesta que yo esperaba.

Todo aquello era completamente nuevo e indescifrable para mi.

Sin embargo, esperaba entenderlo algún día.

Al final llegué a la parte que tanto ansiaba.

Decía así.

Líquido a percibir: 1.100€

Había recibido mi primera nómina.

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La vida está compuesta por pequeños momentos que se graban en tu mente para siempre.

Cobrar tu primera nómina es uno de ellos.

Esa nómina no es solo una nómina.

Es cortar el cordón umbilical con tus padres.

Es dejar de depender de su caridad para empezar a ser libre e independiente.

Sin embargo, el vocabulario de esa nómina es muy «especial»: devengos, deducciones, cotizaciones, líquido, prorrata, base.

Por eso, el 99% de las personas solo mira una cosa: ¿cuánto voy a cobrar?

E ignoran todo lo demás.

Pero tú, que has decidido ser parte de «Cultura financiera en 2 minutos», no quieres ser ese 99%.

Por eso hoy vas a entender tu nómina para siempre.

Empecemos.

Una nómina se divide en devengos (lo que cobras antes de impuestos) y deducciones (lo que pagas al Estado).

Los devengos se dividen de la siguiente forma (aunque hay más):

  • Sueldo base: El precio de tu trabajo.
  • Complementos salariales: Incrementos de tu sueldo base por circunstancias personales (antigüedad) o profesionales (e.g. plus por nocturnidad).
  • Horas extraordinarias: Horas trabajadas fuera de tu jornada laboral.
  • Salarios en especie: Pago en forma de servicios como el bono transporte, seguro médico, etc.

En las deducciones diferenciamos entre el IRPF y las cotizaciones a la Seguridad Social.

En el IRPF hacemos un pago adelantado a Hacienda. Si has pagado de más o de menos lo descubres en la Declaración de la Renta.

Las cotizaciones son pagos a la Seguridad Social a cambio de un derecho en el futuro.

Se pagan sobre un porcentaje de la suma de diferentes devengos (sueldo base, complemento salarial, etc).

Esa suma de devengos con la que se paga a la Seguridad Social es la base de cotización.

Base de cotización = Sueldo base + complementos salariales + paga extra

Sobre esta base de cotización pagamos a la Seguridad Social cuatro coberturas diferentes:

  1. Contingencias comunes (4,70%): Protege ante enfermedades comunes, bajas por maternidad y pensiones.
  2. Desempleo (1,55%): Da derecho a cobrar el paro.
  3. MEI (0,12%): Trampa. Se llama cotización pero no da derecho a nada. Solo sirve para llenar el Fondo de Reserva.
  4. Formación Profesional (0,10%): Permite acceder a la formación estatal impartida por FUNDAE.

Todo esto es lo que se conoce como cotizaciones por parte del trabajador.

Y, si te has fijado, la suma de estas cotizaciones es muy baja. Exactamente, un 5,87%.

Esto es porque nos falta una segunda parte: las cotizaciones empresariales.

¿Qué tienen de especial estas cotizaciones? Que se calculan sobre el salario bruto del empleado y aumentan el coste salarial.

Si tu sueldo bruto es de X al año, el coste para la empresa es de X + Y. Siendo Y las cotizaciones empresariales.

Es decir, las cotizaciones empresariales esconden un coste de tu salario del que poca gente es consciente.

¿Cuánto? Veámoslo.

Las cotizaciones empresariales están compuestas por las mismas cotizaciones del trabajador más dos adicionales: las contingencias profesionales y el Fondo de Garantía Salarial (FOGASA).

Las contingencias profesionales cubren ante enfermedades o accidentes relacionados con tu trabajo (y desde 2023 lo que sobra se destina al Fondo de Reserva). 

El Fondo de Garantía Salarial cubre el pago de salarios e indemnizaciones por despedido si tu empresa quiebra.

Los tipos de cotización de estas contingencias son las siguientes:

  1. Contingencias comunes: 23,60%
  2. Desempleo: 2,60%
  3. MEI: 0,58%
  4. Formación Profesional: 0,60%
  5. Contingencias profesionales: Depende del tipo de actividad que realices (Detalle).
  6. FOGASA: 0,20%

¿Y cuánto suman en total? Un 29,88% (suponemos un 2,5% por contingencias profesionales)

Por ejemplo, un sueldo bruto de 30.000€, a la empresa le supone 39.024€.

¿Y cuánto te llega a ti a final de mes? 23.118€.

El 60%.

En otras palabras, a la empresa le cuesta tu salario casi el doble de lo que tú recibes.

¿Mucho? ¿Poco?

Eso te toca a ti decidirlo.


(*) Para el cálculo del IRPF he asumido un persona de 25 años, soltera y sin personas a su cargo.